23 Enero 2011
El Nuevo Día
El mercado ha sufrido tantos cambios que el trabajador tiene que adoptar nuevas tácticas
Por Rebecca Banuchi / rebecca.banuchi@elnuevodia.com
Las variaciones en el mercado laboral obligan a quienes buscan empleo a adoptar nuevas estrategias.
Además de un nueva actitud al enfrentar la búsqueda de un trabajo, los cambios requieren ajustes en aspectos técnicos como el formato del resumé, así como la manera en que el candidato se proyecta al ser entrevistado para un puesto de trabajo.
“Ya los resumés no son lo que eran en el pasado porque hay tanta competencia que tú tienes que demostrar en ese documento que eres una persona valiosa para esa empresa”, advirtió Melissa Concepción, presidenta de Smart Option Search.
Según la ejecutiva, la forma en que se estructura un resumé cambió desde el inicio. En lugar de comenzar con el mentado objetivo de desarrollar las destrezas adquiridas en un puesto de trabajo que permita el desarrollo profesional se debe empezar por enumerar todos los logros que se han obtenido durante la carrera.
“Comienza probando a ese reclutador cuando lee (el resumé) que ha tenido resultados óptimos en empleos anteriores”, abundó.
Al momento de la entrevista, cada detalle cuenta. Desde el tono que se emplea al hablar, la formalidad al expresarse y la buena apariencia, indicó Concepción.
La especialista en reclutamiento destacó, además, que es necesario que las personas que pretenden integrarse al mercado laboral estén dispuestas a salir de la “zona de comodidad” y se lancen a experimentar en áreas nuevas. De igual forma, resaltó que buscar un empleo de por sí es un trabajo intenso, por lo que hay que estar preparado.
“Las personas que realmente están buscando, y hacen un buen plan de trabajo y se organizan, y todos los días hacen gestiones para buscar trabajo tienen muchas más oportunidades”, afirmó.
Para Michelle Benítez, presidenta de la Sociedad para la Gerencia de los Recursos Humanos (SHRM, por sus siglas en inglés), es crucial demostrar destrezas de comunicación efectiva -tanto oral como escritas- y ser consciente tanto de las fortalezas como las debilidades.
“Lo más importante es atreverse a conocer qué cosas faltan y atreverte a adquirirlas. No todo tiene que ser a través del estudio formal. Cuando uno está interesado, hay un elemento de autodesarrollo, cosas que uno las puede complementar y adquirir”, enfatizó Benítez.
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